A FEDERICO GARCÍA LORCA

Después de la falta de resultados en la búsqueda de la fosa con los restos de Federico García Lorca, uno de los más famosos poetas y dramaturgos de la literatura universal, asesinado en Granada a comienzos de la Guerra Civil, comparto la opinión de Ian Gibson (El Estado debe buscar de una vez a Federico García Lorca, El País, 30 de diciembre de 2009), de que deben continuar los trabajos para localizarla, especialmente, y de las demás víctimas en ese lugar de dicho conflicto.
Debe cerrarse así una herida abierta que dura más de setenta años y que impide una visión conciliadora de nuestro pasado. La injusta y horrorosa "desaparición" del insigne poeta, valdría ella sóla como justificación, sin importar esfuerzos. Ningún estado que presuma de democracia avanzada, seguridad y libertad, puede tener tal lastre en su pasado sin resolver de forma adecuada.

Las Vegas, en el bar, c. 1949




La exposición sobre la fotógrafa norteamericana Lisette Model, en la Fundación Mapfre, reune un conjunto de sus más importantes imágenes entre los años 3o y 5o. Son fotografías que reflejan un isntante de la condición humana en los dramáticos años (exilio, guerra, violencia) del siglo XX, los que precedieron y vivieron la Segunda Guerra Mundial.

La decadente alta burguesía en Niza, la ciudad y las gentes de Nueva York, hombres y mujeres solitarios en los bares de Las Vegas o Reno, son los protagonistas de sus instantáneas con un realismo exacerbado que podríamos considerar expresionista. Sin ninguna concesión a la belleza física o a la juventud, muestran un mundo que protagonizó, provocó y fue victima a su vez, de las circunstancias que transformaron la sociedad en el siglo pasado.

ANTE LA CUMBRE DE COPENHAGUE


Suscribo la editorial común de 56 periódicos en 45 países, titulada Frente a una grave emergencia, (EL PAIS, 7 de diciembre de 2009), realizada ante la celebración de la Cumbre de Copenhague sobre el cambio climático que padece nuestro planeta.

RECONSTRUCCIÓN DE UN HOMBRE


La última película del director inglés, Ken Loach, Buscando a Eric (Looking for Eric), es una muestra de sus mejores esencias, con un buen guión de Paul Laverty, basado en la idea original del famoso jugador del Manchester United, Eric Cantoná, que participa como actor.
El protagonista, sin embargo, es un cartero de Manchester, Eric Bishop, que pasa por una situación personal difícil, pues su segunda mujer le ha dejado sólo, sin ningún aliciente, con sus dos hijastros adolescentes, que se verán envueltos en problemas con la mafia local. Las cosas cambiarán cuando tenga que cuidar a su nieta, pues la hija de su primera mujer, y gran amor, a la que abandonó, estudia en la universidad y necesita su ayuda. Para todo ello, y para recuperar la felicidad de vivir, es decir, ese primer amor perdido, que ahora tiene que ver por obligación, recurrirá a Eric Cantoná, que a modo de ángel protector, le aconsejará en los momentos decisivos.
La película supone una descripción de la clase trabajadora inglesa a comienzos del siglo XXI, donde el toque realista del director, se acompaña en este caso con las apariciones fantásticas de la estrella del futbol. Nos muestra una sociedad individualista determinada por las circunstancias económicas que impone el capitalismo, donde uno de los elementos cohesionadores, de solidaridad en la sociedad, es la afición a ese deporte, convertida en una religión, en una auténtica droga.